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Cataluña elimina la selectividad de septiembre: las PAU se realizarán en julio a partir de 2027
El Consejo Interuniversitario de Cataluña establece las fechas para 2026, último año con convocatoria extraordinaria en septiembre.
Publicado: 20 de diciembre de 2025, 14:08
El Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC) ha anunciado las fechas de las pruebas de acceso a la universidad (PAU) para el curso académico 2025-2026, confirmando que se llevarán a cabo del 9 al 11 de junio. Esta edición será significativa, ya que representa el último año en que se ofrecerá una convocatoria extraordinaria en septiembre. A partir de 2027, esta prueba se adelanta a julio, una medida destinada a homogeneizar el sistema educativo catalán con el resto de comunidades autónomas de España.
El cambio de fechas se alinea con las políticas educativas que buscan mejorar la organización académica y permitir que todos los estudiantes inicien sus estudios universitarios simultáneamente en septiembre. Hasta ahora, Cataluña era la única comunidad que mantenía la selectividad de septiembre, mientras que otras regiones ya habían implementado convocatorias en julio. Este ajuste no solo simplificará la planificación académica, sino que también permitirá realizar las matrículas universitarias de manera más eficiente, cerrando el proceso antes de que comience el curso académico.
La decisión de trasladar la estructura de las PAU a fechas más alineadas con otras etapas educativas —como la primaria, la ESO y el bachillerato— es también parte de un esfuerzo para ofrecer un modelo educativo más coherente y que favorezca el rendimiento académico. La comunidad educativa observa este cambio con interés, ya que podría causar un impacto significativo en la manera en que los estudiantes enfrentan su acceso a la universidad.
El cambio de fechas se alinea con las políticas educativas que buscan mejorar la organización académica y permitir que todos los estudiantes inicien sus estudios universitarios simultáneamente en septiembre. Hasta ahora, Cataluña era la única comunidad que mantenía la selectividad de septiembre, mientras que otras regiones ya habían implementado convocatorias en julio. Este ajuste no solo simplificará la planificación académica, sino que también permitirá realizar las matrículas universitarias de manera más eficiente, cerrando el proceso antes de que comience el curso académico.
La decisión de trasladar la estructura de las PAU a fechas más alineadas con otras etapas educativas —como la primaria, la ESO y el bachillerato— es también parte de un esfuerzo para ofrecer un modelo educativo más coherente y que favorezca el rendimiento académico. La comunidad educativa observa este cambio con interés, ya que podría causar un impacto significativo en la manera en que los estudiantes enfrentan su acceso a la universidad.