Progresista 50%Conservador 50%
Begoña y Carmen celebran su boda a los 73 años, rompiendo tabúes sobre el amor en la tercera edad
La historia de amor entre estas dos mujeres en una residencia destaca la importancia de la visibilidad y el amor en la vejez.
Publicado: 20 de diciembre de 2025, 01:44
Begoña y Carmen, dos mujeres de 73 años, han dado el paso de casarse en la residencia donde viven, marcando un significativo momento en sus vidas y ofreciendo un mensaje potente sobre el amor y la aceptación en la vejez. Su historia comenzó hace siete años en otra residencia de La Rioja, donde su conexión se forjó a través de miradas y el deseo de comunicarse. A pesar de la barrera del lenguaje, Carmen aprendió el lenguaje de signos para poder comunicarse con Begoña, quien es sordomuda.
La relación entre Begoña y Carmen se ha desarrollado en un entorno donde la aceptación y el amor han sido parte de su día a día; su historia ha estado marcada por la sencillez y la cotidianidad. A lo largo de su conexión, ambas han enfrentado retos, como la enfermedad de Carmen durante la pandemia, donde Begoña fue un pilar fundamental en su recuperación. Este acto de amor se ha convertido en un símbolo para muchos, con apoyo y emoción de otros residentes, destacando que su amor, a sus edades, no solo es valioso, sino crucial para derribar los tabúes que rodean al amor en la tercera edad.
Carmen, emocionada, ha compartido un mensaje que resuena con fuerza, enfatizando la necesidad de que todas las personas se amen sin importar el género. La dirección de la residencia ha reconocido la importancia de su relación, organizando una celebración para conmemorar su unión, lo que ha sido un reconocimiento de que historias como la de Carmen y Begoña son excepcionales y merecen ser celebradas. Al compartir su experiencia, están ayudando a abrir un diálogo necesario sobre cómo el amor puede prosperar en todas las etapas de la vida, sin prejuicios ni barreras.
La relación entre Begoña y Carmen se ha desarrollado en un entorno donde la aceptación y el amor han sido parte de su día a día; su historia ha estado marcada por la sencillez y la cotidianidad. A lo largo de su conexión, ambas han enfrentado retos, como la enfermedad de Carmen durante la pandemia, donde Begoña fue un pilar fundamental en su recuperación. Este acto de amor se ha convertido en un símbolo para muchos, con apoyo y emoción de otros residentes, destacando que su amor, a sus edades, no solo es valioso, sino crucial para derribar los tabúes que rodean al amor en la tercera edad.
Carmen, emocionada, ha compartido un mensaje que resuena con fuerza, enfatizando la necesidad de que todas las personas se amen sin importar el género. La dirección de la residencia ha reconocido la importancia de su relación, organizando una celebración para conmemorar su unión, lo que ha sido un reconocimiento de que historias como la de Carmen y Begoña son excepcionales y merecen ser celebradas. Al compartir su experiencia, están ayudando a abrir un diálogo necesario sobre cómo el amor puede prosperar en todas las etapas de la vida, sin prejuicios ni barreras.