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BComú exige al alcalde de Barcelona frenar los desalojos en Vallcarca o no negociará otros temas
Janet Sanz advierte que el gobierno municipal debe detener el desalojo inminente que afecta a 40 personas, incluidos niños.
Publicado: 4 de julio de 2025, 07:39
Barcelona se encuentra en el centro de una polémica relacionada con los desalojos en el barrio de Vallcarca, donde el grupo político Barcelona en Común (BComú) ha exigido al alcalde Jaume Collboni que frene de manera inmediata las acciones de desalojo que afectan a 40 personas, de las cuales 13 son niños. Janet Sanz, presidenta del grupo, dejó claro que si el gobierno municipal no detiene estos desalojos, BComú no negociará ningún asunto que tenga que ver con la ciudad.
La advertencia se hace tras el anuncio del ayuntamiento sobre la intención de solicitar autorización judicial para llevar a cabo los desalojos. Sanz criticó la falta de diálogo con los afectados y subrayó que estas propiedades son suelos públicos. También mencionó que la reciente oposición ciudadana logró detener temporalmente los desalojos, lo cual fue visto como un triunfo del activismo vecinal.
Sanz advirtió que su petición representa un “punto de inflexión” para mantener el diálogo abierto con el gobierno municipal, y que la próxima Comisión Extraordinaria de Vivienda no se llevará a cabo hasta que se cumplan dos condiciones. Este escenario es delicado para el alcalde, quien recientemente enfrentó un revés en la negociación de vivienda protegida, un tema prioritario para los ciudadanos frente a la emergencia habitacional en Barcelona.
La advertencia se hace tras el anuncio del ayuntamiento sobre la intención de solicitar autorización judicial para llevar a cabo los desalojos. Sanz criticó la falta de diálogo con los afectados y subrayó que estas propiedades son suelos públicos. También mencionó que la reciente oposición ciudadana logró detener temporalmente los desalojos, lo cual fue visto como un triunfo del activismo vecinal.
Sanz advirtió que su petición representa un “punto de inflexión” para mantener el diálogo abierto con el gobierno municipal, y que la próxima Comisión Extraordinaria de Vivienda no se llevará a cabo hasta que se cumplan dos condiciones. Este escenario es delicado para el alcalde, quien recientemente enfrentó un revés en la negociación de vivienda protegida, un tema prioritario para los ciudadanos frente a la emergencia habitacional en Barcelona.