Progresista 38.1%Conservador 61.9%
Aliança Catalana enfrenta crisis interna en Berga por candidatura de Judit Vinyes, crucial para su futuro político
La selección de la concejal Vinyes como candidata genera descontento en las bases del partido de Silvia Orriols ante las elecciones de 2027.
Publicado: 20 de diciembre de 2025, 01:41
Aliança Catalana se encuentra sumida en una crisis interna significativa en Berga, localidad considerada clave para su futuro político en el contexto de las próximas elecciones municipales de 2027. La elección de Judit Vinyes, concejal de Berga Grup Independent, como candidata a la alcaldía ha desatado un fuerte malestar entre los militantes del partido, quienes la consideran una oportunista que podría poner en riesgo la cohesión de la formación.
La situación ha escalado a tal punto que se ha planteado la posibilidad de una dimisión masiva de militantes si se impone a Vinyes como cabeza de lista. Inma Nadal, presidenta de la dirección local de Aliança, ha intentado calmar la marea, indicando que se espera que al menos la mitad de los afiliados se mantenga leal al partido, pese al descontento. Los conflictos internos se dan en un momento en que Aliança Catalana busca expandir su base de apoyo, especialmente en Berga, donde la CUP ha sido capaz de implementar políticas que han resonado con los ciudadanos.
La complejidad de esta situación no solo radica en la candidatura de Vinyes, sino también en la mayor estrategia del partido de intentar consolidarse en un ambiente político donde la CUP ha mantenido una fuerte influencia. Con el ascenso de Aliança Catalana como una alternativa política, el futuro de Berga se presenta como un desafío no solo para el partido, sino también como un reflejo de la dinámica política en Cataluña y del creciente tira y afloja entre ideas progresistas y conservadoras en el contexto actual.
La situación ha escalado a tal punto que se ha planteado la posibilidad de una dimisión masiva de militantes si se impone a Vinyes como cabeza de lista. Inma Nadal, presidenta de la dirección local de Aliança, ha intentado calmar la marea, indicando que se espera que al menos la mitad de los afiliados se mantenga leal al partido, pese al descontento. Los conflictos internos se dan en un momento en que Aliança Catalana busca expandir su base de apoyo, especialmente en Berga, donde la CUP ha sido capaz de implementar políticas que han resonado con los ciudadanos.
La complejidad de esta situación no solo radica en la candidatura de Vinyes, sino también en la mayor estrategia del partido de intentar consolidarse en un ambiente político donde la CUP ha mantenido una fuerte influencia. Con el ascenso de Aliança Catalana como una alternativa política, el futuro de Berga se presenta como un desafío no solo para el partido, sino también como un reflejo de la dinámica política en Cataluña y del creciente tira y afloja entre ideas progresistas y conservadoras en el contexto actual.